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La alcaparra (Capparis spinosa) es un arbusto que crece en las zonas áridas del Mediterráneo y, en menor medida, en las zonas semiáridas del interior de la Península Ibérica. Es un arbusto perenne, caducifolio, espinoso, lo que dificulta su recolección exclusivamente manual. Crece espontáneamente en suelos áridos, pedregosos, calizos y arcillosos, y no siempre es fácil de cultivar. En el municipio de Ballobar, situado en la comunidad autónoma de Aragón, la recogida de alcaparras es una actividad tradicional. Probablemente comenzó con la ocupación musulmana y dio a conocer este pueblo, al borde del desierto más grande de Europa, los Monegros. Se dice que estas alcaparras fueron entregadas al Zar de Rusia a cambio de caviar.
Desde la década de 1980, la recolección de alcaparras con fines comerciales se ha detenido debido a la competencia de las alcaparras cultivadas intensivamente en Andalucía y el norte de África, y solo sobreviven para el autoconsumo Recientemente, sus características distintivas han hecho que estas alcaparras silvestres, que crecen lejos del Mediterráneo, sean buscadas nuevamente.
Se trata de un producto único muy ligado al territorio local: los arbustos crecen silvestres únicamente en pedregales orientados al sur en un área muy limitada alrededor del pueblo.
La yema de la alcaparra Ballobar (alcaparra) se recoge antes de la floración junto con el fruto (alcaparran); ambos se conservan en salmuera y son un producto gastronómico de alta calidad con una ternura y una fragancia distintivas.
En la actualidad hay dos personas, miembros de la Asociación de Productores Ecológicos de Monegros, que están trabajando para recuperar y ampliar el conocimiento de este producto. Están asistidos por una veintena de mujeres del pueblo que, desde el amanecer hasta el anochecer en los meses de junio a septiembre, se dedican a la exigente labor de recoger yemas y frutos de estos arbustos espinosos.
Es un Baluarte del Arca del Gusto de Slow Food.
Un verdadero placer para el gusto desde 1954.
Ingredientes: Alcaparras de Ballobar 9-11mm, agua y sal marina.
Se vende en frasco de 80 gramos o de 200 gramos para consumidor final.
También disponible en frasco de plástico de 1300 gramos para hostelería.
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